Sant Jordi 2015 y las cartas de papel y boli
En días como hoy, Sant Jordi, soy más consciente que nunca que los meses vuelan y que de repente, sin darnos cuenta ya ha pasado otro año de un plumazo.
Otro 23 de Abril en que las calles de Barcelona y de cada ciudad y pueblo de Cataluña se van a llenar de libros, de rosas de mil formas y colore; van a llenarse de personas que se escapan un momento del trabajo para dar una mirada a las paradas, de parejas que pasean de la mano, ella esperando que él le regale una rosa, él preguntándose qué título va a escoger ella para él. Las escuelas hablarán hoy más que nunca de leyendas, tradiciones, cultura, libros y amor. Y quién más quien menos llegará a casa con una flor y un libro más que por la mañana.
La ‘Diada de Sant Jordi’ es uno de mis días favoritos del año. Barcelona está más bonita que nunca y si hace sol ya no podemos pedir más!!
El año pasado os conté la leyenda de este día en este POST, así que este año, aprovechando que hoy es un día de libros, cultura, rosas y amor quiero hacer una pequeña reivindicación a las cartas de papel y boli. No me he vuelto loca, no!! Soy muy fan del email, los whatsapp y demás medios de comunicación actuales, pero en el fondo soy también una romántica empedernida.
Me gustan las cartas de papel, las notas, los post-it en la nevera, las dedicatorias en la primera página de un libro que regalas. Mis abuelos maternos, él catalán y ella belga pasaron muuuuuuchos meses mandándose cartas de papel y boli. Cartas de esas que se escriben con dedicación, pensando cada palabra, escogiendo cada frase, intentando hacer buena letra; cartas de esas que van dentro de un sobre, que se meten en un buzón y que tardan días en llegar a su destinatario… y de hecho no tienes la certeza de cuándo la ha recibido o si ha llegado a hacerlo.
Puede que suene cursi, o antiguo, o las dos cosas, pero esa dedicación, el tiempo invertido, los nervios al meterla en el buzón, y el esperar días a recibir una respuesta me parecen algo maravilloso que estamos perdiendo.
Por eso hoy, un día súper especial para mí, Sant Jordi! Reivindico las cartas de papel y boli, quizá no para el día a día (soy una romántica empedernida pero también soy muy práctica), pero si para ese día especial, para esa sorpresa que queremos dar, para sorprender a alguien a quién queremos, para darle un valor añadido a ese regalo o mensaje que queremos transmitir.
Porque estoy segura de que a la mayoría de vosotros hace mucho que nos os llega una carta escrita con papel y boli, una carta escrita con cariño y dedicación, una carta de esas que no tiras, ni “borras”, de esas que guardas en un cajón, de hecho en EL CAJÓN donde guardas los recuerdos que no quieres perder nunca.
Feliz Diada de Sant Jordi a todos, espero que volváis a casa con vuestra rosa, vuestro libro, y con ganas de escribir una carta de papel y boli.